LA GASTRITIS
La gastritis representa una inflamación del estómago. Los tipos de
gastritis incluyen la bacteriana (por Helicobacterpylori), gastritis autoinmunitaria con anemia perniciosa, gastritis erosiva (por consumo
de ácido acetilsalicílico o antiinflamatorios no esteroideos), inducida
por alcohol o reflujo biliar y gastritis atrófica.
El tratamiento de la
gastritis depende de su causa; lo más útil es reducir el ácido del estómago con fármacos. La bacteria Helicobacter pylori infecta a la mitad de la población mundial, causa
gastritis crónica. Los factores bacterianos,
ambientales y genéticos del hospedador se combinan para definir
el grado lesivo al estómago en la gastritis.
La gastritis hemorrágica puede ser resultado del consumo crónico
de alcoholo fármacos, enfermedad de Crohn,infección por virus de inmunodeficiencia humana (VIH) u otras causas. La gastritis atrófica
es una inflamación crónica de la mucosa gástrica sin erosión, pero
con hipoclorhidria o aclorhidria; es importante vigilar la ingestión
de vitamina B12, calcio y hierro férrico.
LA GASTROENTERITIS
La gastroenteritis es la inflamación del recubrimiento del estómago y el intestino que puede ser consecuencia de la ingestión de
toxinas químicas en los alimentos (como en mariscos, hongos, arsénico o plomo), consumo excesivo de alcohol, enfermedad transmitida
por alimentos contaminados, virus, catárticos u otros fármacos.
La gastroenteritis produce malestar general, náusea, vómito, borborigmos, diarrea con o sin sangre y moco, y en ocasiones fiebre y postración. La gastroenteritis viral es contagiosa. Muchos virus distintos causan gastroenteritis, incluidos rotavirus o adenovirus. La infección por
norovirus se relaciona con aproximadamente 90 % de las gastroenteritis agudas no bacterianas.
Los mariscos contaminados y los ostiones crudos son los causantes principales de la gastroenteritis. Las personas
que contraen gastroenteritis viral casi siempre se recuperan por completo si consumen los líquidos necesarios para reponer los que pierden por diarrea y vómito.
Como el epitelio intestinal constituye la barrera más grande e
importante contra las toxinas, antígenos y flora entérica en la luz
intestinal, su disfunción es un factor que contribuye en gran medida
a la predisposición a enfermedades inflamatorias.
Alimentación en la gastritis y gastroenteritis
Gastritis.- Limitar el consumo de alimentos que no pueda tolerar y tener una hidratación adecuada.
Gastritis crónica: Consumir pequeñas porciones de alimentos, pero frecuentes, de alimentos bien tolerados. Conforme se tolere los alimentos, progresar a cantidades mayores de alimentos variados. Restringir la ingestión de grasa, la cual deprime la motilidad alimentaria, y el consumo de alcohol. Vigilar la intolerancia a la lactosa. Añadir alimentos con fibra si se toleran.
Gastroenteritis aguda: el paciente debe estar en ayuno o con nutrición parenteral parcial durante las primeras 24 a 48 horas para dar descanso al estómago. Administrar hielo en trozos para calmar la sed. Puede ser útil la rehidratación por vía oral. Si es posible, progresar a una dieta blanda. Desaconsejar el alcohol. Omitir la lactosa en caso necesario. A medida que mejore la tolerancia, incorporar gradualmente alimentos con fibra. Pueden ser eficaces las soluciones para rehidratar.
Educación Nutricional en la Gastritis y Gastroenteritis
- Evitar los agentes agresivos en trastornos crónicos: alcohol, cafeína y ácido acetilsalicílico (ASPIRINA).
- Consumir alimentos ricos en acido fólico y vitamina B12.
- Analizar las fuentes de calcio y riboflavina si se suspenden los productos lácteos.
- Consumir alimentos con fibra para alcanzar y mantener la integridad intestinal.
- Cocinar muy bien los alimentos para evitar futuras toxiinfecciones alimentarias.
- La rehidratación oral se recomienda como tratamiento de primera línea con deshidratación leve o moderada y gastroenteritis.
BIBLIOGRAFÍA
Escott, S., 2012. Nutrición, Diagnóstico y Tratamiento (7A. ED) España: Lippincott Williams & Wilkins